Y Eliseo le dijo: ¿Qué puedo hacer por ti?... Dime qué tienes en casa. Y ella respondió: Tu sierva no tiene en casa más que una vasija de aceite.
Entonces él le dijo: Ve, pide vasijas prestadas por todas partes a todos tus vecinos, vasijas vacías; pero no pidas pocas.
Luego entra a tu casa y cierra la puerta detrás de ti junto a tus hijos y echas el aceite en todas estas vasijas, poniendo aparte las que estén llenas.
Y ella se fue de su lado, y cerró la puerta tras sí y de sus hijos; y ellos traían las vasijas mientras que ella llenaba de aceite las vasijas.
Y sucedió que cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo ella a un hijo suyo: Tráeme otra y él le dijo: No hay más vasijas. Y entonces cesó el aceite.
Al instante ella fue y se lo contó al hombre de Dios. Y él le dijo: Ve, vende el aceite y paga tu deuda, tú y tus hijos podéis vivir de lo que quede.
Ahora, podemos decir que esta mujer tenia conocimiento de lo profético pues ella habitaba en un lugar donde moraban profetas; también tenia claro lo que era cobertura pues reconocía el orden del reino y conforme a esto accionó su fe ante el profeta, ella pidió, clamó por una palabra profética, vino esa palabra a su vida y obedeció ¿y que sucedió? Ocurre el milagro, se multiplica el aceite en otras vasijas, llenándolas hasta que se acabaron las vasijas fue ahí cuando cesó el aceite.
Hagamos un paralelo entre el aceite de esta mujer y el aceite que hay en nuestras vidas. Primero veamos la trascendencia del aceite.
Aceite: En Hebreo es Shemen, se utiliza para varias cosas imprescindibles como por ejemplo:
- Ungir la tierra
- Ungir a un futuro líder (sacerdote o rey)
- Se usaba para preservar el cuero de un escudo
- En el proceso de hacer el pan
- Como medicamento, para sanar heridas (ungüento)
- Como señal de luto
- Como señal de regocijo
- Se usaba como perfume
- Se usaba en los sacrificios de las ofrendas de alimento
- Como combustible en lámparas
Como se puede apreciar se usaba bastante, por ende su valor en lo comercial era alto.
Si ponemos esto en un plano espiritual, pensemos que nosotros mismos somos la tierra en la que Dios ha depositado su semilla para producir los olivos que dan como fruto el aceite, nuestro corazón puede ser una vasija y nosotros podemos dar vida a la multiplicación de éste aceite, analicemos lo que está en nuestro receptáculo, ¿Cuánto aceite tienes?, ¿Para que tienes este aceite? ¿En que lo usas? ¿Estas haciendo lo que el Señor te dijo que hicieras con ese aceite, o lo estas guardando?, voy a cambiar las preguntas, ¿Cuántas palabras proféticas te han declarado? ¿Has obedecido a esas palabras? Bueno estas preguntas están en mi cabeza, pero no quiero quedarme tan sólo en el pensamiento, hay que actuar, accionar dirigido por el Señor, sé que también estoy entre profetas que han declarado palabra de Dios sobre mí sé que a través de la obediencia podré multiplicar ese aceite en vasijas vacías, es el tiempo de despertar a la voz del Señor y obedecer, accionar es la clave, como lo hizo la viuda y entonces veremos la prosperidad de Dios, la multiplicación, la gloria de Dios manifestada, no tan solamente en nosotros, en nuestra familia o iglesia si no también en nuestra tierra en nuestra nación y en las naciones de la tierra. Por eso les insto a que cada palabra profética que han derramado sobre ti como un ungüento nuevo, la multipliques en los que tienes a tu lado vacíate sobre ellos, multiplícate en otros, no estoy hablando de clonación sino de simiente, tú eres padre de naciones, tú eres madre de naciones deja que fluya el aceite de Dios en ti para llenar a otros, ya no pienses tanto en ti, o en lo ungido que puedas ser, deja de aparentar ser lleno y llénate de verdad de Él y llena las vasijas vacías a tu alrededor, colma de lo que el Señor te ha dado a tus compañeros de trabajo, a tus familiares inconversos, a las personas que ves en la calle que están tan necesitadas de el óleo de gozo, paz y amor.
Esta es la palabra que Dios me entregó, esto es lo que Él dijo a mi persona, quiero pedir perdón públicamente al Señor porque he pensado y actuado sin madurez, hace algún tiempo atrás pensaba ser ungido y creía que actuaba como ungido pero no lo era, tratando de hablar como los demás que si son ungidos uuuufff wuuau tremenda novedad, pero la gracia de Dios se manifestó otra vez y me está cambiando, modelando mi vasija y perfeccionando el aceite que fluye desde mi interior para vaciarme en otros.
Al Eterno Rey sea la alabanza y la gloria a su nombre.
Deuteronomio 7:13 Y te amará, te bendecirá y te multiplicará; también bendecirá el fruto de tu vientre y el fruto de tu tierra, tu cereal, tu mosto, tu aceite, el aumento de tu ganado y las crías de tu rebaño en la tierra que El juró a tus padres que te daría.